¿Alguna vez te has preguntado
por qué estás en la situación en la que estás? Aunque sea positiva o negativa, hay una razón por la que estás viviendo
lo que estás viviendo el día de hoy: las decisiones que tomas.
Es muy importante tener
consciencia de este factor tan importante y determinante en nuestras vidas
porque muchas veces tomamos decisiones sin darnos cuenta, de forma
inconsciente. Y el resultado puede no agradarnos mucho en la mayoría de las
ocasiones.
Existe un gran error en muchas
personas, las cuales piensan
que su vida está determinada por sus sentimientos y emociones, en lugar de sus
decisiones. Y aunque está claro que las
emociones son muy importantes en nuestra vida, si nos dejamos
guiar por ellas y pensamos que nosotros somos lo que sentimos, podemos acabar
muy mal.
Todos tomamos decisiones de una u otra forma. Incluso
decidir no tomar una decisión, es tomar una decisión. Así que, te recomiendo mucho comenzar a analizar qué
tipo de decisiones importantes haz tomado y en base a qué las hiciste.
Muchas veces decidimos hacer
cosas o irnos por algún camino en la vida de forma muy emocional, irracional o
compulsiva. Nos dejamos llevar por cómo nos sentimos y en base a nuestros
sentimientos decidimos qué hacer.
Ejemplo: Estoy en una tienda de electrónica. Veo una tele
de 60 pulgadas, hermosa, moderna y muy muy grande. Inmediatamente comienzo a
pensar en comprarla, sin importar que tengo muchas deudas en mi tarjeta de
crédito y que mi situación económica no está para este tipo de gastos tan
grandes.
Pero en el momento parece la
compra perfecta, así que me dejo guiar por mi emoción y sin dudarlo ¡compro la
televisión! La emoción me
dura algunos días hasta que me llega el estado de cuenta de mi tarjeta, en
donde veo que mi deuda se ha incrementado mucho y que ahora tengo que pagar una
gran cantidad de dinero.
Este es un excelente ejemplo de cómo en la mayoría de las ocasiones nos dejamos guiar por los
sentimientos, por impulsos emocionales que nos dan en el momento. Sin
embargo, después, ya con más calma y
tranquilidad, nos damos cuenta que cometimos un error.
Te invito a reflexionar sobre este tema tan importante
para que poco a poco vayas cambiando estos patrones de toma de decisiones en tu
vida. Cuando estamos más conscientes, decidimos mucho mejor, de forma más
racional y con criterio.